El país necesita algún tipo de sistema de auditoría obligatoria —gestionado por el libre mercado, no por el gobierno— para cada gasto público. ¿No pagarías a un auditor privado, que compitiera por el negocio, para que aportara transparencia a cada forma de gasto público? La alternativa —cada vez— es un fraude masivo. Algunos de los auditores también serían fraudes, así que esa parte debe ser vulnerable a la monitorización por IA para detectarlo.