En algún momento, aceptamos una realidad que no tiene sentido. Las criptomonedas, la tecnología que prometía libertad, ahora te ofrecen menos privacidad que el efectivo, las tarjetas, los bancos e incluso los procesadores de pagos. Todo lo que haces es observado. Cada movimiento es rastreable. Y de alguna manera, el mundo simplemente se encogió de hombros. Ahora mismo hay todo un movimiento que reconoce que la privacidad no debería ser un lujo. No debería ser un añadido. No debería ser un "bueno tenerlo". La privacidad es la base de la libertad financiera, y estamos aquí para devolverla a la gente. Esto no es una queja, sino un llamado a construir. Y estamos construyendo las herramientas que te devuelven el control, de forma silenciosa, segura y sin compromisos. El futuro de las criptomonedas es privado. Y Bypass ya camina hacia ese futuro.