Alguien que no tiene mucho puede ser más generoso dando un poco que una persona rica dando mucho. Algunas personas responden a la generosidad mientras que otras responden al dinero. Quieres el primer tipo contigo y siempre quieres tratarlos con generosidad. Cuando no tenía nada, era tan generoso como podía con personas que valoraban mi generosidad más que los niveles más altos de compensación que otros podían permitirse darles. Por eso, se quedaron conmigo. Nunca lo olvidé, y me esforzé por hacerles ricos cuando tenía la oportunidad. Y ellos, a su vez, fueron generosos conmigo a su manera cuando más necesitaba su generosidad. Los dos conseguimos algo mucho más valioso que el dinero—y también conseguimos el dinero. Recuerda que el único propósito del dinero es conseguirte lo que quieres, así que piensa bien en lo que valoras y ponlo por encima del dinero. ¿Por cuánto venderías una buena relación? No hay suficiente dinero en el mundo para que te desprendas de una relación valiosa. #principleoftheday