Puede apostar que lo primero que hicieron las autoridades fue dirigirse directamente al centro de monitoreo y recuperar las imágenes para asegurarse de que no se filtraran. En una anarco-tiranía moderna, el manejo de la percepción es lo que realmente importa, no la realidad. Si la gente no puede ver un crimen como un apuñalamiento masivo en un tren o el asesinato de niñas en una clase de baile, en un sentido muy real no sucedió.