Tómese un momento para darse cuenta de lo lejos que ha llegado Solana. Pasamos de ser el criptoactivo desvalido a la potencia y columna vertebral de casi toda la actividad en cadena. Solana todavía tiene un largo camino por recorrer, y el trabajo no está hecho, pero maldita sea, no puedo estar más agradecido por todo el progreso.