El gobierno federal estaba reteniendo la ayuda contra los estadounidenses en crisis en función de sus creencias políticas, esto debería horrorizar a todos los estadounidenses, independientemente de su persuasión política. Durante años, los empleados de FEMA bajo la Administración Biden retrasaron intencionalmente la ayuda muy necesaria para los estadounidenses que sufren desastres naturales por motivos puramente políticos. Evitaron deliberadamente las casas que mostraban apoyo al presidente Trump y la Segunda Enmienda, recopilaron y almacenaron ilegalmente información sobre las creencias políticas de los sobrevivientes y no informaron su comportamiento malicioso. No dejaremos que esto se mantenga.