Las mejores cosas de la vida no vienen con una etiqueta de precio. El calor del sol, el sonido de las olas y la paz que llega cuando tomas una respiración profunda y lo absorbes todo. El dinero puede comprar comodidad, pero no puede comprar asombro. Puede comprar ruido, pero no paz. Puede adquirir cosas, pero no momentos como estos. Disminuye la velocidad y mira a tu alrededor. Los tesoros más valiosos son gratis y están en todas partes.
15,22K