Los expertos también pueden cometer errores, pero el riesgo en cada operación es fijo. Los novatos también pueden cometer errores, pero los errores pueden tener un efecto dominó. Solo aquellos que pueden controlar las pérdidas pueden mantener las ganancias. No se trata de hacer lo correcto, sino de no agrandar los errores; si cometes un error y no lo reconoces, podrías perderlo todo de una vez.